
El miércoles pasado, el Teto recibió a su psiquiatra personal, la doctora Valeria D’Abate, y se trasladó, previa autorización, hasta su hogar, según informó su abogado.
“El paciente continúa con cuidados médicos domiciliarios por su cuadro de depresión, no estando en condiciones de comparecer ante un juzgado”, reza el documento firmado por la profesional de la clínica en donde estuvo.

Lo dicho por la médica es fundamental para la continuidad de la causa, pues, tras la difusión de la denuncia por violencia de género y amenaza con arma de fuego que le entabló su ex, con esta resolución podría atrasar las audiencias.
Fernández relató que el Teto la amenazó con un arma de fuego y la obligó a acompañarlo a comprar cocaína. Por sus adicciones habría perdido varios trabajos y siempre prometía dejar las drogas, pero nunca cumplía, según contó la mujer. Tras el revuelo, el animador cayó en un profundo cuadro depresivo que lo llevó a la internación.